FALACIAS 
L. Soriano
Hoy no les voy a machacar con los desastres de nuestros Políticos, Gobernantes o Jueces. Hoy les hablare de las falacias. No es lo mismo, puede que sean de los mismos, pero no, no es lo mismo.
Me han cambiado el nombre a mi calle, ahora se llama De La Tolerancia. Agárrense. La Tolerancia en sí es un concepto alto en ideal y bajo en aplicación. Ya lo decía Popper, la Tolerancia para salvaguardarla, hace falta que se sea intolerante con los intolerantes. Entonces es difícil definir la into/tole. ¿Cuando dejo de ser tolerante para pasar a ser intolerante para defender la tolerancia o al tolerante? Tendremos que acudir a un juzgado. En nombre de la Paz se mata a mucha gente, como en el de Dios a muchísima más, se ha matado, se está matando y se matará.
Mi amigo Fred Lucente, General Americano de ascendencia Toscana, fallecido ya, decía “yo estaba en la Guerra para defender la democracia, jamás para practicarla”. Sí, la frase no era suya, pero se la han apropiado tantos que uno más no va a importar.
Entonces, esto es como el Chili picante. Como la pimienta rabiosa. Inhibidores del hambre. En Asia y en México, cuando había hambre se comía uno un chili y se acabó el hambre. Algo como el futbol, sólo que más barato. Pena que lo que persiguen es inhibidores de cerebros. Distractores natos. Nos cuentan estas batallitas, mientras ellos van moviendo sus fichitas, y ni nos enteramos. Luego ya, es muy tarde y este Estado “opresor”, que entrecomillo para que los timoratos no dejen de leerme, campa por sus respetos. Son omnímodos, omnipotentes, todopoderosos, tienen la fuerza de la Ley y la Ley de la fuerza. Claro que no hay nunca que confundir, LEY con JUSTICIA. Esta última no se practica por antigua y poco “progre”.
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